En el primer trimestre del año, el crecimiento de la actividad económica se mantuvo sólido (3,6%). Esto fue resultado de una combinación de dinámicas favorables para el PBI.
La economía mantuvo un ritmo sólido de crecimiento en el 1T2025, alrededor de 3,8%, ligeramente por encima de lo esperado. Continuaron rebotando los sectores primarios como las agroexportaciones y la pesca, que aún fueron afectados por el clima en el primer trimestre del 2024.
Este mes, la agenda política se ha centrado nuevamente en la inseguridad ciudadana. La muerte de un cantante de un grupo musical conocido, presuntamente a manos de la extorsión, generó nuevas críticas hacia el ministro del Interior, quien fue censurado por el Congreso, lo que a su vez desató nuevas manifestaciones.
Así, la economía crecería 2,8% en el 2025 (similar a la proyección de enero) y 2,4% en el 2026 (0,2 p.p. por debajo de la proyección previa).
Tras una expansión nominal de aproximadamente el 2,5 % en 2024, se prevé que los saldos aumenten un 5,3 % para finales de 2025. Este repunte se verá impulsado por la recuperación económica en curso y el fortalecimiento gradual de las finanzas de los hogares de bajos ingresos, lo que debería reducir aún más las tasas de morosidad.
El 40% de los adultos en esta región señala que la inseguridad afecta sus ingresos, mientras que el 60% de ejecutivos¹ la considera uno de los factores que más impactarían el entorno de negocios. Debido a esta desconfianza, no se observan grandes proyectos de inversión privada en la zona.
Los elevados niveles de indecisión son, en buena medida, consecuencia de la improvisación en las candidaturas y la falta de liderazgos políticos. Por ello, es muy probable que la incertidumbre acompañe al electorado hasta los tramos finales de la contienda.
